20.9.06




Somos

Se estrena este 20 de septiembre en el CELARG, Caracas, la serie “Somos”, dedicada a mostrar la actualidad de más de treinta comunidades indígenas representantes de igual número de etnias o pueblos originarios venezolanos. Producida por la Cooperativa Estrella Films para el Ministerio de la Cultura, la serie representa un importante aporte en el registro de nuestro patrimonio cultural, el cual deberá ser difundido a través de los medios televisivos próximamente.

En esta serie el cineasta Carlos Gómez de la Espriella, uno de los miembros del Proyecto Manamundo, participó en la dirección de 7 de los 35 documentales. En específico fueron los documentales de los pueblos Timote, Warekena, Baré, Kurripako, Baniva, Ñengatú y Piapoco. Es importante resaltar el apoyo del Centro de Investigaciones Etnológicas de la Universidad de Los Andes.

En las fotos, arriba el cerro Kurimacare en el río Casiquiare, un monumento natural y cultural con una leyenda baré, narrada en el documental Somos Baré. Abajo un grupo de niños maroeños juegan al camarógrafo y al sonidista.

15.9.06

Mastros y Maibaums

En Europa, todavía el Maibaum o Árbol de Mayo, procedente de milenios enteros de adoración a la fertilidad… En Amazonas, Venezuela, los Mastros, símbolo de un proceso intercultural…

El Maibaum que se puede observar en muchos pueblos de Austria, por ejemplo, país ubicado en plena Europa Central, podría ser la versión antigua del Mastro, presente durante las festividades patronales de varios pueblos y caseríos amazónicos, como Maroa y Wayanapi. Es necesario un estudio histórico a fondo, probablemente en la amazonía brasilera (de donde vinieron los Mastros de la amazonía venezolana), para saber cómo se pasó de aquel Maibaum a los dos Mastros…

“Mastros y Maibaums, culto a la armonía” es un documental dirigido por Carlos Gómez de la Espriella y producido con el apoyo del Proyecto Manamundo, en paralelo a la realización de varios documentales en la región sur del Amazonas venezolano, durante los últimos dos años. Se espera sirva como expresión de los vínculos culturales existentes entre pueblos en apariencia tan diferentes como el austriaco y el amazónico.

En las fotos, de arriba hacia abajo: 1) Cartel de promoción de la “paradura” del Maibaum en Hallstatt, Austria. 2) Paradura del Maibaum en Hallstatt, Austria. 3) Mastros de Maroa, estado Amazonas, Venezuela. 4) Mastros en San Carlos de Río Negro, estado Amazonas, Venezuela. 5)Detalle de Mastro. 6) Paradura del Mastro en Wayanapi, estado Amazonas, Venezuela. (Fotos: Carlos Gómez de la Espriella. Las últimas cuatro son extraídas de los documentales Somos Baniva, Somos Baré y Somos Warekena)












10.9.06

Travesías

Parece que el precio de la gasolina en Venezuela es el más envidiado del mundo. Para algunos europeos, por ejemplo, sería una especie de fantasía hecha realidad poder llenar un tanque de gasolina todas las veces necesarias, sin gastar un sueldo mínimo de allá en una semana. Aquí de seguro hasta le pedirían bañar el carro con el preciado líquido al “bombero” – el encargado de llenar los tanques en Venezuela, por lo general una persona por cada dispensador, que de paso hace el favor de limpiar el parabrisas- , individuo que no existe allá, en Europa, donde el cliente debe bajarse del carro a echarse la gasolina él mismo, a pesar de pagar en promedio Euro y medio por litro (aproximadamente Bs. 4. 500,00, mientras que aquí el litro no pasa de 100 bolívares…).

Sin embargo, en Venezuela la mayoría de las personas no tienen vehículo propio y se movilizan en transporte público. Este es el caso del señor de la fotografía. Se trata de un pasajero de un autobús llanero. El hombre pagó todos los puestos de atrás (el sitio conocido en el argot de los pasajeros venezolanos como la “cocina”, por ser muy caluroso, debido a su cercanía al motor del transporte), pero casi no le quedó espacio para sentarse él, en medio de su cargamento de almohadas…

En la otra foto se pueden apreciar algunos detalles del autobús por dentro. El transporte público en Venezuela, en un alto porcentaje es de verdad vergonzoso. Y lo peor es que para conocer bien este país, la mejor forma podría ser este tipo de vehículos públicos, por supuesto, no estamos hablando de turismo…

El ferrocarril siempre ha sido una aspiración para conectar a todo el país, pero mientras la gasolina sea tan barata, cada vez más habrán particulares con carros, gente en autobuses de todo tipo, gandolas, etc. Ser un país rico en petróleo, no parece resultar la vía para mejorar la calidad de vida de todos…

Este es uno de los tantos aspectos que se manejan dentro del Proyecto Manamundo, de acuerdo a sus objetivos dirigidos a la revitalización de las zonas rurales venezolanas. El transporte público debe ser mejorado para contribuir con las condiciones de vida de los habitantes de la periferia.